Solomillo de castañas

El solomillo de castañas es un segundo plato elegante y sabroso, perfecto para ocasiones especiales o cenas otoñales. 

Esta receta combina la ternura y el fuerte sabor del solomillo con el delicado dulzor de las castañas, creando un equilibrio refinado y armonioso. 

La carne, cocinada en su punto justo para mantenerse suculenta, se acompaña de una salsa a base de castañas que aporta una nota cremosa y envolvente, realzando el sabor natural del filete. 

Aromatizado con hierbas como el romero y el tomillo, y a menudo mezclado con vino o caldo, este plato es un verdadero homenaje a los productos de la estación otoñal. 

El filete de castaña es una elección sofisticada para quienes desean sorprender a sus invitados con una combinación única de sabores y una experiencia culinaria memorable.

Para 4 personas:

  • 4 lonchas medianas de solomillo  
  • 300 g de castañas cocidas al gusto con una hoja de laurel
  • 100 g de tocino en una loncha
  • 1 dl de caldo o leche hirviendo
  • 1 cebolla pequeña
  • 1 diente de ajo
  • aceite
  • sal y pimienta

Pelar las castañas. 

Después corta el tocino en daditos, dóralo con la cebolla con una gota de aceite, córtala finamente y el diente de ajo, que luego retirarás, y un poco de aceite. 

Cuando esté transparente y crujiente, no seco, añade el caldo, la sal y la pimienta, las castañas y déjalo cocer lentamente unos diez minutos, removiendo suavemente. 

Cocer el solomillo a su gusto, más o menos hecho, ponerlo en la sartén con las castañas, cocer un par de minutos más, servir caliente.