Los muffins de crema de calabaza y castañas son un postre que celebra los sabores del otoño, combinando el dulzor de la calabaza y el sabor envolvente de las castañas en una armonía de aromas y texturas. Estos dulces suaves, perfectos para la merienda o como cierre de una comida, se caracterizan por su aroma envolvente, que evoca la magia de los días frescos y las hojas que caen. La calabaza, con su dulzor natural y su color vivo, combina a la perfección con la pasta cremosa de castañas, creando una combinación deliciosa y sorprendente. Fáciles de preparar e irresistibles al paladar, los muffins de crema de calabaza y castañas son una forma deliciosa de llevar a la mesa la calidez y la convivencia de la estación otoñal.
Combinar la mermelada con la crema de castañas y el huevo batido por separado. Agrega la esencia de vainilla y luego la harina de arroz poco a poco, finalmente la levadura. Vierte todo en los moldes de chocolate y hornea a 200 grados durante 25 minutos.
Para las cestas simplemente derrito un poco de chocolate al baño María y lleno los moldes de papel. Dejar enfriar y luego meter en el congelador, cuando estén bien congeladas rellenarlas con la masa de muffins.
No lleva azúcar porque la mermelada y la crema de castañas ya están endulzadas.